Respecto a los adultos, nacidos desde el 1965 para adelante, señalaron que “deben tener dos dosis de la vacuna, ya sea la triple viral o la doble viral”.
Además advirtieron que “es muy importante que aquellas personas que vayan a viajar afuera de la Isla corroboren que tengan las dos dosis de vacuna triple viral” además de que “si se va a viajar con un nene de seis meses, éste debe recibir una dosis extra”.
Los que estén dentro de las edades comprendidas pueden acudir a vacunarse a cualquier Centro de Atención Primaria de Salud, o a los hospitales públicos, de lunes a viernes, en el horario de 8 a 19.
La Responsable del Programa Ampliado de Inmunizaciones de la Provincia, Lucía Villa, explicó que “el sarampión es una enfermedad viral muy contagiosa, que afecta sobre todo a los niños y se transmite por las gotas procedentes de la nariz, la boca y la garganta, de las personas enfermas”.
En cuanto a los síntomas, la infectóloga observó que “los pacientes, inicialmente presentan fiebre alta, moco por la nariz, puede haber conjuntivitis” y que “a los 3 ó 4 días después aparece una erupción en la piel, que son manchas rosaditas en la cara, el cuello, y se van extendiendo gradualmente por el resto del cuerpo”.
Advirtió que “el sarampión puede causar complicaciones graves, como la neumonía por ejemplo; y no hay un tratamiento específico” por lo que “la única forma de prevenir es mediante la vacunación”.
En ese marco señaló que “desde 1998, en la Argentina se introdujo al calendario obligatorio la vacuna triple viral; y en el 2000 se notificaron los últimos casos de sarampión endémico en el país”.
“Gracias al intenso trabajo realizado por el país, de presentar evidencias de la interrupción de esta transmisión endémica, es que se declaró al país libre de sarampión”, manifestó, pero señaló que “el problema ahora es la presencia de casos en países vecinos, y en estos últimos días la notificación de casos en la provincia de Buenos Aires, que fueron importados con arribos de extranjeros que estaban infectados con el virus y los transmitieron a personas de acá que no estaban vacunados o que tenían dosis insuficientes”.
Villa sostuvo que “los movimientos humanos permanentes hacen indispensable controlar que tanto los niños como los adultos tengan vacunación completa para sarampión, para impedir que se vuelva a introducir el virus y se quede en el país”.
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