Medio centenar de Payaterapeutas provenientes de una fundación de Tucumán, llegaron a Ushuaia esta semana y llevaron adelante variadas actividades de capacitación y de visitas a centros asistenciales para llevar una sonrisa a personas que se encuentran internadas.
El Centro Preventivo Local de Adicciones (CePLA), recibió junto a niños, niñas, jóvenes y adultos mayores a los payaterapeutas de Tucumán que recorren la Argentina.
Ayer en un ambiente de festejo y alegría, la Municipalidad de Ushuaia extendió la invitación a integrantes de la Fundación Kau Yak, CAAD, Jugotecas y adultos mayores para promover la salud integral y permitir así que interactuaran con los encantadores Payaterapeutas.
La Secretaria de Políticas Sociales, Sanitarias y Derechos Humanos, Malena Teszkiewicz valoró “la tarea de los terapeutas que hacen mucho más que curar, dado que tienen el lema que dice que estar sano tiene que ver con reír y recuperar la capacidad de juego, amor y lograr compartir con otros”.
Se trata de un grupo de cincuenta “payasos de hospital”, personas especializadas en la técnica de teatro adaptada al ámbito hospitalario que realizan estimulación emocional a pacientes internados.
Los profesionales, que transitan toda la Argentina, contaron sentirse “muy conmovidos en esta tarea de ir en la búsqueda de fortalecer la salud y la alegría, para mejorar el fenómeno social y sentirse mejor con uno mismo”.
Visita a Casa de Gobierno
Luego la delegación se dirigió a Casa de Gobierno donde fueron recibidos por la gobernadora Rosana Bertone y las legisladoras Andrea Freites y Liliana Martínez Allende, entre otras autoridades.
Bertone agradeció a las legisladoras por haber trabajado en el seno de la Comisión de Salud junto a los demás parlamentarios que la conforman, para sancionar la ley que les dio un marco legal a la actividad de los payamédicos en Tierra del Fuego, habilitando el ingreso de estos en los establecimientos de salud.
Bertone destacó el trabajo previo realizado para poder contar con dicha normativa, orientado a sortear “la resistencia” que había en principio en el seno de los profesionales de la salud, y destacó la importante labor que realizan los payamédicos dentro los establecimientos sanitarios, que han podido acceder tanto en el sector público como del privado.
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